sábado, 4 de abril de 2020


ELS MICROBIOS

(Apuntes para la  Gran Historia del Teatro Valenciano)



Es julio de 1884 y un hombre, aislado de su familia, tiene parada su capacidad creativa ante la inacción de su, en otros momentos, divertida musa.

Son días difíciles. El cólera morbo está atacando de nuevo y hay una epidemia que se ha manifestado en Tolón. Lleva todo un siglo apareciendo una y otra vez. Aunque no lo sabe, cuando ese siglo termine, la maldita enfermedad habrá segado en España unas 800.000 vidas.

Conforme avancen los días comenzará a idear y a escribir una obra. Antes de que, en el proceso creativo, la pieza esté concluida creemos saber, viéndolo a través de nuestro microscopio retrospectivo, que ya tiene clara en su mente a quién la va a dedicar.
Es un funcionario, hijo de hacendados y comerciantes de la seda que se ha adaptado a tiempo al cambio de paradigma económico que está sucediendo en el Reino de Valencia y su otrora poderosa industria sedera.

Es un gran hombre, aunque sólo mida 1’57 (1), pues la valía de los hombres no se mide en centímetros, sino en hechos; y el hecho es que estamos ante un hombre respetado a ambos lados de la cainita política española. Y eso...  eso sólo puede conseguirse cuando eres un profesional en lo tuyo y además tienes un trato exquisito con todos, fruto de un carácter empático. Ese respeto en lo profesional, que ya ha adquirido y que se irá ampliando a lo largo de su ascendente y dilatada carrera como funcionario de la Diputación de Valencia, lo tiene también en el mundo de las letras. La obra que tiene entre manos no es la primera que lleva a cabo.

Sí, es Julio y la tradicional feria que atrae a la capital a gentes de toda Valencia se ha suspendido. Sólo hace meses que Robert Koch ha aislado el bacilo que causa la enfermedad (cabe decir que anteriormente lo había hecho Filippo Pacini pero sin apenas repercusión). El camino a recorrer es largo, pero ya se ha iniciado.

Manuel Millás Casanoves, que es nuestro hombre, tiene 39 años en ese año 1884, año que supone un nuevo impulso en su creación dramática que se había visto interrumpida hasta el punto que Constantí Llombart y Sanmartín y Aguirre le dedican, en el Melonar de Valensia (1877), estos versos:



“Poeta líric volgué ser
Millás, qu’ es un chic simpatic,
Y en lo chénero dramátic
Es ah ón algo bó va fer;
Dòrm sa ploma en lo tinter
Sinse donar res huí á llum,
Mes com ho ha pres per costum
D’ell diu la chent indiscreta,
Qu’ el numen d’ este poeta
Se vá á covertir en fum.”

     
Melonar de valensia: versos a Manuel Millas. 1877
Biblioteca Darijo- Haila

Pero no se convirtió en humo. Salidos de su numen se imprimieron en ese mismo año, además de la obra que nos ha llevado a escribir estas líneas, los sainetes En lo mich del Mercat y El marqués de Miragall.

Pero si hoy me he puesto a escribir sobre Manuel Millás, a quien tenía previsto traer por primera vez a mi blog bajo otra excusa, es por su obra Els Microbios, una obra de circunstancias escrita a raíz de la epidemia de cólera que se nos anunciaba pero que tendría más dramática repercusión en nuestras tierras a partir del siguiente año en el que también se suspendió la feria de Julio.

Els Microbios. Juguete cómico en un acto y en verso. Original de Don Manuel Millás. Valencia. Imprenta de la Casa de la Beneficencia. 1884. Estrenado con extraordinario éxito en el Teatro Ruzafa, la noche del 4  de octubre de 1884.

Els Microbios de Manuel Millás Casanoves. Cubierta.
Biblioteca Darijo - Haila



La dedicatoria escrita desde un corazón que sufre del mal de ausencia de la esposa reza así:

Dedicatoria de Els Microbios.
Biblioteca Darijo-Haila

A la Sra. Doña Inés Sagreras de Millás.
Queridísima Inés: Como pasatiempo en mis ratos de ócio durante tu breve ausencia,he escrito la presente obrita que el público ha juzgado favorablemente colmándola de aplausos. Recibe, pues, unos y otra, juntamente con un estrecho y cariñoso abrazo que te envía
tu Manuel.


El reparto del estreno fue el siguiente (2):

PERSONAJES                 ACTORES
Pepeta                               Sra. Pardinillas
Nicomedes                        Sra. Huertas
Prudencio                          Sr. Llorens
Toni                                   Sr. Ferrando
Tomasico                           Sr. Esteve (P.)
Un municipal                    Sr. Rius

La acción se desarrolla en Valencia en 1884.

La lengua de Els microbios es la “lengua común”. La que hablaban y entendían todos. Dirigida por y para los valencianos. Lengua Valenciana, sin artificios. Por ello no deja de sorprender que, en la por otro lado, brillante e interesantísima biografía de Manuel Millás, escrita por su deudo, el periodista Jaime Millás Covas, Escenas de un burgués en la Valencia del Ochocientos, encontremos expresiones del tipo:

... los patricios de la cultura valenciana, pese a que tiempo atrás habían observado con reticencias el éxito del teatro popular de Escalante por estar expresado en un idioma valenciano de frecuentes giros y manipulaciones populistas... teatro poco culto” (op. cit. pag. 72)
Porque es, cuanto menos, curioso que hable de manipulaciones quien se ha atrevido incluso a manipular los títulos de las obras que escribió su bisabuelo, incluida la que nos ocupa, que cambia por “microbis”, perdiendo la pureza del lexema griego “bio”.
También encontramos inconcreciones como la que sigue, que dada su complejidad no abordaremos ahora pues será motivo de estudio y tratamiento en sucesivas entradas de este blog:

y el uso de la lengua propia, llamada llemosí en aquella época” (op. cit. pag. 105)

O esta otra “perla” con una afirmación categórica a la que ha desprovisto de todos los matices que en realidad se dieron:

Estamos hablando de la Renaixença, apuesta cultural que favoreció la articulación social y el compromiso de estos hombres de cultura en la defensa del uso del valenciano, entendido como variante dialectal del catalán (le llamaban llemosí)” (op. cit. pag 137)
El valenciano estaba dialectalizado y castellanizado ... Distaba mucho de ser una lengua culta” (ibid.)

Esconde Juan José Millás que el catalán no estaba codificado, que su dialectalización era tan grande que se tuvieron que inventar lo de “catalán oriental y occidental” y que se escribía de tantas maneras distintas como autores lo intentaban.

El summum del disparate nos parecen las dos siguientes afirmaciones:

...utilizaban la lengua autóctona, llamada llemosí o valenciano para diferenciarla del tronco común filológico compartido con el catalán.

¿De verdad nos quiere hacer creer que los escritores valencianos denominaban a su lengua con un afán de diferenciación? Denominaban “valenciana” a su lengua con independencia de las pretensiones políticas, todavía no muy evidentes, del pancatalanismo. Y “llemosí”, siguiendo cierta tradición, para referirse a un estado menos evolucionado, ideal pero falso, que remitía, a veces, a un pasado común y aureo de las lenguas del este Español y sur de Francia. Pero como ya he dicho mi afirmación es también una simplificación que requerirá otros trabajos de documentación que llegarán.

Y por último, porque si no voy a hablar más de Juan José que de Manuel:

su fama local la había adquirido escribiendo sainetes precisamente en valenciano y apoyando unas normas lingüísticas compartidas con sus vecinos catalanes”.

A esto en mi pueblo se le llama mentir como un bellaco.

Como siempre que se trata de contrarrestar los efectos nocivos del pancatalanismo lo primero que hay que hacer es acercarse a las publicaciones originales. Y ni la ortografía, ni el léxico, ni la morfología usadas por Manuel Millás son catalanas. Algunos ejemplos extraídos del texto:

abaecho, condená (no condemnada), miqueta (no “mica”) bicho (no bestiola), cuala, chavet, chichines, chulles, chiulem (no “xiulem”), chispes, sanc en seba (no “sang amb seba”) en Torrent (no “a Torrent”), fumeral (no “ximeneia”), formigar, meló dAlcher (no “sindría”) coche (no “cotxte” ni “cotxo”), rellonche (no “rellotge”), mampendre (no “emprendre”), estes (no “aquestes”), lo que siga ya ho vorem (no “el que siga ja ho vorem”), navaixa (no navalla), panolles (no “panotxes”), puesto (que causa urticaria al pancatalanismo al igual que otras palabras valencianas por acabar en “o” átona) etc.

Els microbios de Manuel Millás es un claro ejemplo de la capacidad de las sociedades para recuperarse de las desgracias y en el caso de la sociedad valenciana del uso del humor dentro de la cultura propia como elemento terapeutico.

Con gran sentido del humor están retratados momentos que hoy nos pueden resultar familiares: la cuarentena, quienes intentaban saltársela o evadirla, las autoridades policiales ejerciendo el control y hasta la fuerza, las medidas “higiénicas” como hervir el agua, el ácido fénico (o el fórmico) (llamado “fúrrico” en el texto), la fumigación, el fuego, el aislamiento, la delación, el repudio, las medidas sanitarias, las multas, el miedo, la distancia social, las teorías ridículas, la idea de que el “miscrobio” no se eliminaba ni a cañonazos, etc.

Los personajes históricos salen con los nombres distorsionados. José de Letamendi aparece caricaturizado como "Llepamendi". Robert Koch con el nombre arreglado a "Kok" con una "solución" fonética que evitara las posibles dudas que generaba la "ch" a final de palabra. También aparece un doctor Frean, que hace referencia al doctor Jaime Ferrán y Clúa quien apoyado por un grupo de médicos locales inició una campaña de vacunación en Valencia que dividió a la sociedad y que le enfrentó con gran parte del grupo de poder médico, incluido Ramón y Cajal. Se llegó a hacer una Real Orden en la que las condiciones que impusieron al doctor Ferrán hicieron inviable seguir con la campaña de vacunación.

Grabado del Doctor Ferrán vacunando en Alcira.
Revista La Ilustración Nacional. Año VI. 1885. Colección Ángel C. R.

En el corazón de Valencia, en la Calle Pascual y Genís número 23 una placa esculpida nos recuerda su figura y su gesta:
Placa al Doctor Jaime Ferrán.
En la Calle Pascual y Genís nº 23 de Valencia
"Jaime Ferrán. Insigne médico español, inventor de la vacuna contra el cólera, instaló en esta casa su laboratorio y aplicándola por primera vez en el mundo practicó más de 52.000 inoculaciones en esta región con éxito clamoroso. Le auxiliaron en aquella memorable jornada los doctores Inocente Paulí, Amalio Gimeno, Ángel Pulido, Manuel Candela , V.Peset, P.Garín, R. Pastor, V. Navarro, J.Torres Babí, J. Estruch, F. Sociats, (Alcira) y J. Clará (Castellón). Los estudiantes de medicina valencianos le dedican esta lápida bajo los auspicios de sus profesores de la Asamblea médica regional y del Excmo. Ayunt.º de esta ciudad. Marzo de 1918."
Cruz en recuerdo de las víctimas del cólera del siglo XIX.
Fotografía Frank Darijo.


Aquella epidemia tuvo un número tan elevado de víctimas que se tuvo que recurrir al enterramiento masivo en fosas comunes.
En el cementerio de Valencia un monumento coronado por una gran cruz recuerda a los fallecidos.
Recomendamos la inciativa "Museo del Silencio" promovida por don Rafael Solaz Albert que consiste en visitas guiadas al cementerio de Valencia y que ponen en valor estas y otras historias. Puesta en valor que tiene en cuenta la poesía, la arquitectura, la historia sentimental, la oficial e incluso la más oculta de una parte del pasado de Valencia. 
Esa parte tan frágil, pues tiene que ver con el inexorable olvido y el esfuerzo titánico por el recuerdo.
En esa zona se abrieron grandes zanjas y es uno de los lugares de esos enterramientos masivos que se cubrieron con cal.
Acompañan a la Cruz  y a las Armas de Valencia, una placa de recuerdo  y la simbología típica funeraria como puedan ser el búho, o las cifras alfa y omega, Principio y Fin. 


La representación de Els Microbios hizo, en cierto modo, un camino opuesto al de la propagación del cólera, pues si este, según los estudios especializados, lo hizo del sur al norte de nuestra región, las representaciones transcendieron los teatros de la capital valenciana para encontrarlas, por ejemplo, en Gandía en Noviembre  de 1884 (3) o en la ciudad de Alicante en marzo de 1885 (4), para llegar a las comarcas interiores a finales de ese año. (5)


Foto de Maniel Millás Casanoves. El Cuento del Dumenche 1914
Manuel Millás Casanoves
Biblioteca Darijo-Haila

Personalidades de la historia que sufrieron en algunos momentos la incomprensión o el ataque como Letamendi, pelado sin piedad por Pío Baroja; o Jaime Ferrán y los ataques a su vacuna. 
Manuel Millás Casanoves es uno de esos valencianos que permanecen en el olvido o desconocimiento de la mayoría de sus compatriotas. Conocido sólo por quienes se dedican al estudio o a la lectura de la literatura en valenciano del siglo XIX y principios del XX. Esa literatura cuyo conocimiento ha sido hurtado a nuestro jóvenes, para quienes el sistema sólo ha reservado el adoctrinamiento en las figuras de los traidores al espíritu valenciano, esos colaboracionistas con el pancatalanismo destructor de las esencias valencianas. Pero los hechos, la vida y la obra de Manuel Millás no se doblegan fácilmente  a las pretensiones e intereses del pancatalanismo.

Él no se olvidó, cuando editó Els microbios de agradecer la parte que en el éxito de la obra correspondía al elenco capitaneado por Manuel Llorens, uno de los grandes actores y directores de la escena valenciana de la época. Reproduzco la ·Advertencia" por su interés para la historia del teatro valenciano:
 "De lo íntimo de mi corazón tributo las más expresivas gracias á los artistas todos que con tal acierto han desempeñado este juguete, y á quienes en gran parte se debe el lisongero éxito que ha alcanzado; y en especial á mi antiguo y querido amigo Sr. llorens, por el cariño con que lo apadrinó, apenas se lo leí, y por la manera tan acertada con que lo ha dirigido y ha desempeñado el papel de protagonista. Reciban pues, todos ellos, la espresión de gratitud de su afectísimo Manuel Millás."
La pandemia del coronavirus ha forzado el tono y carácter de esta publicación, pero, Dios mediante, volveremos a hablar de Manuel Millás, pues queda mucho que contar de su obra dramática y tendremos que referirnos también a su producción poética y epigramática.

Me despido con los últimos versos de Els Microbios. En ellos Millás juega con la costumbre de pedir aplausos al publico "palmaetes" con el acto cómico de matar los microbios con la mano:
"Esperant una miqueta,
que tant l'autor com els novios
volen una palmaeta
pa acabar en los microbios
qu'han quedat en la escaleta."

NOTAS
(1)   Escenas de un burgués en la Valencia del Ochocientos, Jaime Millás, Sargantana, 2017. p.29.

(2) Siendo Prudencio, Nicomedes, Pepeta y Tomasico tipos tomados de sus primeros sainetes.

3)   Así lo vemos en el número 200 de El Litoral, Semanario Científico-Literario y de intereses materiales. Semanario colaborativo en el que podían participar todos los subscriptores. Ese día, domingo 9 de noviembre de 1884, se representó en el Teatro junto a la zarzuela “Sensitiva”. La vitalidad del teatro en valenciano queda patente por el anuncio, en el mismo diario, de que la propia imprenta que lo editaba estaba ultimando la impresión de El Tesor dels Chermanells, de Antonio Roig y Civera quien había sido redactor de dicho periódico.

(4)   El Constitucional Dinástico, típico periódico de partido, en su número 5036 de 3 de marzo de 1885 daba, en la sección de gacetillas, la noticia de su representación en el Teatro Español, junto con otra obra del autor, Retratos al viu:
“Con la comedia cómica en dos actos, Con la música a otra parte, Els microbios y Retratos al viu, inauguró el sábado la segunda temporada cómica la compañía que bajo la dirección de los Sres. Esteve y Llorens actúa en este coliseo.
Por indisposición del Sr. Esteve se encargó del desempeño de los papeles confiados á este apreciable actor el señor llorens, el cual fué muy aplaudido como también los demás actores que tomaron parte en esta función.
El público salió completamente satisfecho y creemos que la empresa ha de obtener buenos resultados.
Al Sr. Esteve le deseamos cuanto antes un completo restablecimiento.”
(5)   El Serpis, Alcoy, domingo 13 de diciembre de 1885, anunciaba una función para ese día en el Teatro Principal de la localidad, en la que estaba programada “La aplaudida pieza en un acto, Els Microbios”
.

sábado, 1 de febrero de 2020

LES GATES MOIXES


(Recupero para el blog este artículo de hace cuatro años)

Las dedicatorias de las obras literarias son un elemento que, en ocasiones, nos permite ampliar los conocimientos sobre el autor y sus circunstancias. Uno de estos autores, tan prolífico en sus obras como en sus dedicatorias, fue el valenciano Enrique Pérez Escrich. Nació Pérez Escrich en 1829 y fue autor teatral y uno de los mejores autores españoles de folletín, género literario dramático de ficción y que hoy se considera “literatura menor”, aunque es un término que me desagrada absolutamente, entre otras cosas porque esa “literatura menor” consiguió que se aficionaran a la lectura miles de personas que de otra forma jamás lo hubiesen hecho.
Por ellas, las dedicatorias, sabemos que aunque llegó a ser un autor de éxito los inicios no fueron fáciles:
“A Dolores. A ti, que has compartido conmigo con la sonrisa en los labios y la esperanza en el corazón las penalidades y amarguras que azotan y envejecen á todo escritor en los primeros pasos de su difícil y espinosa carrera”. La mala semilla. Madrid. 1859.
Entonces al mirarme solo y sin fuerzas (…) quemé una por una las hojas de mi drama”. La dicha en el bien ageno. Madrid. 1857.
También, que si se quería ser alguien había que ir a Madrid:
Madrid es el sueño dorado del poeta de provincia. Desde un rincón de nuestro humilde hogar contemplamos, a través de un prisma fascinador, la sociedad que desconocemos, los hombres que admiramos”. La dicha en el bien ageno. Madrid. 1857.
Que pasó a escribir novela porque era un género más productivo y menos inseguro que el
teatro:
A mi leal amigo Eduardo Zamora y Caballero (...) me obligaron a dedicarme a la novela, literatura ménos trascendente, más productiva y más segura que la del teatro, pues el autor no se juega el trabajo de seis meses á una sola carta que se llama estreno”. El corazón en la mano. Madrid. 1865.
Que valoraba en mucho la amistad:
Querido Tirso: Desde las fértiles riberas del Maestrazgo (…) un tiempo señorío de los caballeros de Montesa (…) Para tí lo he escrito; a tí te lo dedico (…) admítelo, pues, como una lágrima que se une a las tuyas para llorar la memoria de tu virtuosa madre”. El que siembra recoge. (escrito en Vinaroz). Madrid. 1861.
Al señor Don Ricardo San Miguel de Bustamante. Amigo mío (…) he hallado en V. el amigo leal, verdadero y desinteresado...”. El movimiento continuo. Madrid. 1859.
Á Don Juan Rózpide (…) Ahora es inutil buscar un Mecenas que proteja al libro con su nombre, y al autor con sus favores; pero se busca un amigo verdadero, y se le dice: “ te dedico esta obra para que tu nombre vaya juntamente con el mío...”. La mujer adúltera. Madrid. 1864
A Fernando Ossorio, primer actor y director del Teatro del Príncipe (…) cuanto soy te debo, cuanto valgo es tuyo. La ingratitud es el defecto mas asquerosos del hombre (…) por eso la mas querida de mis obras te la dedico á tí, el mas querido de los amigos”. La dicha en el bien ageno. Madrid. 1857.
Y a la familia:
A ti, la madre de mis hijos, mi querida esposa, dedico este drama, en donde el corazon ha reemplazado á la cabeza, porque lo he escrito separado de vosotros, pensando en tí, en mi adorada Carmen, en mi querido Enrique”. La mala semilla. Madrid. 1859.
... y desaba dejar a mis hijos algo que les hiciera comprender lo que valen los padres, y las dulzuras que encierra el hogar doméstico”. El corazón en la mano. Madrid. 1859.
O que era profundamente agradecido, como en esta dedicatoria al autor de “Cada oveja con su pareja”, Ventura de la Vega, de quien hablamos en el artículo que escribimos con ese mismo título:
Al Exmo. Sr. D. Ventura de la Vega. Dedica este juguete cómico, a buena cuenta de lo mucho que le debe”. Ver y no ver. Madrid. 1855.
Ganó mucho dinero, lo que le alejó de sus tiempos de necesidad y bohemia que retrató en la novela autobiográfica “El frac azul. (Episodios de un joven flaco)". Madrid 1864. Dinero que despilfarró con generosidad y le llevó, por ejemplo a escribir desengañado en 1875 en la tercera edición, corregida, de El Frac azul:
El arrepentimiento es un acto natural del hombre; nada, pues, tiene de particular que yo,' humilde descendiente del padre Adán, me arrepienta de haber escrito algunos párrafos en las anteriores ediciones de este libro, y los sustituya por otros al dar á luz la cuarta (…) El novelista, el autor dramático, el pintor, el músico, el artista, en fin, que vende la vida de su inteligencia, corre peligro de languidecer, como Ovidio, en el último tercio de su vida, ó ser atropellado por el coche del mismo que compró sus obras. Esto lo saben muchos y lo evitan pocos”.
Y no dejó de practicar la fina ironía al juzgar sus propias obras:
...hasta que las hojas de este libro sirvan en una tienda de comestibles para envolver especias, que no será tarde”. La mujer adúltera. Madrid. 1864.
A mi leal amigo Eduardo Zamora Caballero (…) Dios quiera que los silbidos no se oigan en Rota, y la crítica me deje hueso sano”. El corazón en la mano. Madrid. 1865.
Pero a pesar de los desengaños, del tiempo y la distancia nunca olvidó su tierra y sus raices:
A mis queridos amigos y paisanos, Pedro Yago, Joaquín Serrano y Ramón Ariño (…) amigos míos; yo no os olvido nunca; entre vosotros he hecho mis primeros versos, y aquellas reuniones literarias que inflamaban la mente del niño, estan grabadas en el corazon del hombre (...) si Dios me ayuda a realizar mis deseos, espero pasar mis últimos días entre mis hijos y vosotros, en un rincón de esa hermosa Valencia, que me sirvió de cuna y que tan gratos recuerdos guarda para vuestro hermano de corazón”. El Rey de bastos. Madrid. 1859.
En la patria nativa de Elias, el cielo sonríe y la tierra canta (…) es una hermosa jaula de oro, colocada en medio de mi jardín, donde el perfume embriaga y el brillo de las flores seduce (…) el lector habrá comprendido que la patria de Elias fué Valencia del Cid, que según afirma el reverendo padre maestro fray Francisco Diago, es la mejor tierra del mundo, porque en ella se encuentran reunidos todos los dones que la naturaleza esparció por el universo”. El Frac Azul (3º ed.) Madrid. 1875. Elías, personaje central de la novela, es un trasunto del propio Pérez Escrich.
Entre sus obras hay una que es la que nos interesa hoy, La mosquita muerta. Madrid. 1857.
En ella aprovecha Escrich para agradecer la labor de los actores:
A Don Manuel Ossorio (…) Esta piececita no tiene otro mérito que el que vosotros le dais en la ejecución”.
Pero para nosotros si que tiene un valor añadido y es que con esta obra pasó de ser autor de la dedicatorias a ser destinatario de una de ellas.
Ello fue con motivo de que en 1865 Rosa Mirallets y Piu acababa en Barcelona una versión en catalán, que en muchos pasajes es una traducción directa desde el castellano:
La gata moixa. Pesa 'b un acte en catala del d'ara y en vers. Escrita per Doña Rosa Mírallets y Piu. Extreta de la que 'n castella 's titula La mosquita muerta. Barcelona en la estampa de D. Manuel Saurí, Carrer Ample, cantonada al de Regomir.
La falta de datos sobre esta autora de tan singulares apellidos (hoy no figuran en el Instituto Nacional de Estadística), ha llevado a varios autores a teorizar sobre su existencia. Algunos creen que era una mujer que escribía bajo seudónimo y otros que el seudónimo escondía a un autor masculino. En todo caso es la única obra impresa que nos ha llegado con esa autoría. Pasamos a reproducir íntegra la dedicatoria:



AL MOLT DISTINGUIT AUTOR 
DON ENRIC PEREZ ESCRICH

Perdona si entusiasta per tas obras
Perez autor, parodio la mosqueta,
Mes tu que tens talent per da, de sobras,
Si tas ideas ricas, torno 'n pobras
Tambè ho perdonarás eccels poeta,
Rahó sobrada tindrás si 'm dius ximpleta,
Al veure 'n l'embolic en qu' ara 'm fico
Mes el cor tranquil me quedará,
Si no 't desdeñas Escrich en aceptá
Aquesta “Gata Moixa” que 't dedico.

La Autora







Biblioteca Darijo-Haila


No habían transcurrido ni diez años y la galería teatral la Edetana publicaba la obra homónima:

LA GATA MOIXA
CHOGUET EN UN ACTE
DE COSTUMS VALENSIANES
ORICHINAL Y EN VERS,
DE
F. PALANCA Y ROCA
VALENCIA 1874.
JUAN MARIANA Y SANZ, EDITOR,
LIBRERO DE LA UNIVERSIDAD Y AYUNTAMIENTO
BAJADA DE S. FRANCISCO,LONJA DE LA SEDA
núm. 11,                                           núm. 7
,







En la pieza valenciana el hilo argumental está ya muy diluído, manteniendose apenas la idea de un testamento que condiciona las relaciones amorosas de los personajes. Y si decimos que la gata moixa en valenciano no tiene ninguna dependencia argumental con la traducción catalana de la obra de Escrich, aún con más rotundidad se puede decir en el aspecto lingüístico.

Pero antes de profundizar y como hemos hecho en alguna otra ocasión, es preciso explicar esa expresión que la galería la Edetana usaba en las cubiertas de las obras teatrales:

“... tanto en castellano como en dialecto del pais.

En este texto valenciano coetáneo (El Mole, 25  de abril de 1855) vemos en qué contexto se usaba “dialecto” y que no hay menoscabo en la apreciación lingüística, ni la más mínima duda sobre su ámbito y sobre la independencia respecto a otras lenguas peninsulares:


“...se diu llengua española, al castellá que se parla y entén en tota España; y dialecte es el valensiá que sols se parla en molts pòbles del antic reyne de Valensia; como el catalá, y el navarro...



Aunque las diferencias están en cada verbo, en cada plural, en las construcciones gramaticales, en los sustantivos de más familiaridad, en el sistema adverbial, etc. hemos tomado una muestra de palabras con el mismo significado pero que son distintas en ambas lenguas y que aparecen en las dos obras. Indicamos entre paréntesis los números de página por si alguien quiere acudir a ellas.

La gata moixa. Lengua Valenciana. Año 1874.     
La gata moixa. Catalán. Año 1865.
Voluntat (dedicatoria)Voluntad (18-29)
Estes (dedicatoria)Aquestas (14-27)
Este (dedicatoria)Aquet (5-11-12-22-29)
Mig (7)Mix (15-28) Mitx (26)
Siñor (7)Seño (16)
Digues (7-10)Diguis (14)
vol (8)Estima (11-27)
Atre (8)Altre (5-12-13-14-20)
Hui (8)Abuy (10-11-25-31)
Estos (8)Aquets (22-26)
Atra (9)Altra (6-7)
Manco (9)Menos (13-32)
Prenga (11)Prengui (9-28)
Desbarata (12)Disbaratán (21)
Te vullc (13)T'estimo (6-10-24)
Pues (13)¡¡¡Doncs (31)
Vórel (13)Veurel (17)
Hasta (13)Fins (28)
Pronte (15)Prompte (25-30)
Colp (16)Cop (31)
Dins (17)Dintre (6)
Pará (18)Parada (30)
Agrá (18)Agrada (6-9-10-11-16-17-20)
Dia (18)Deya (12-21-25-28)
Agarre (18)Agafo (6)
Pedrá (19)Perdrá (14)
En tú (19)Ab tu (7-24-26)
Entonces (20)Allavós (8-12-18)
Poguera (20) Pogués (7-12-21)
Aixó (21)Axó (24)
Pasensia (22)Pasiensia (9-18-27)
Asoles (23)Tot sol (21-28)
De veres (23)De veras (7-21-24)
Cames (24)Camas (6-13-16-25)

Los que hacen burla de las peculiaridades de la lengua valenciana del siglo XIX, la misma que transmitieron los valencianos de padres a hijos durante generaciones, tejiendo el sutil hilo que nos entronca con Joanot Martorell, con Ausias, con Corella, con Morlá, o con Galiana, sin imposiciones, con su evolución natural, babean y nos imponen como paradigma de perfección lingüística el catalán. Ese catalán que, para una persona libre del adoctrinamiento catalanista, sigue sonando raro y feo. Sigamos de nuevo a Mirallets y Piu:
esquerpa... biam... tregue... abesada ab el seu mismo... la pó que em dongui un desaire... no penso que'm costi gaire... cregui qu'aquesta miñona ens ha de fé partarí... danli un cop de colso... de curá un asa... mes ara semblo un pabana... unas cosas tan bonicas... amigu... aixi t'ofegues un asco...
Y mientras la Lengua Valenciana cosechaba epítetos elogiosos, desde Cervantes a Galdós pasando por Carlos Ros, el ansiado “El Dorado” del actual pancatalanismo no pasaba de ser considerado “un aspero dialecto”:

Carlos II el Hechizado. Torcuato Tarragó y Mateos. Madrid.1854


Pero finalmente han alcando El Dorado. El mecenazgo que en vano esperaba Pérez Escrich ha funcionado en nuestros días. Subvenciones millonarias, aunque “molt poc honorables” venidas del norte suavizaron asperezas y “vaselinizaron”voluntades. Hoy somos pocos los que resistimos los embates... pero calidad y cantidad nunca fueron sinónimos.

Nos queda explicar un poco lo de la dedicatoria en catalán a Pérez Escrich. No debería de tener importancia pero lo haremos antes de que el exceso de vaselina convierta la simple anécdota en manipulación en la que resbalen los incautos. La lengua en la que Mirallets escribió la dedicatoria a Pérez Escrich no era la lengua en que este hablaba con sus amigos valencianos. Recurriremos de nuevo al hilo conductor de este pequeño artículo, las dedicatorias. Era junio de 1857, y en la imprenta de Don Cipriano Lopez, en el número 19 de la Cava-baja de Madrid, imprimían El Maestro de Baile, pieza cómica en un acto y en prosa que un año antes se había representado en el teatro del Príncipe:

DEDICATORIA.
A Don José Bernat Baldoví.
Pòc val, amic meu, esta pòbra comedieta; pero es la primera que done a llum despues de haber vist y admirat en esena la última fulla de laurél poético, en que, baix del titul de “Si te pica... ráscate,” acaba de enriquir la seua corona satírica la Musa del Chuquer.
Sòc valensiá de sánc pura, y rabiós partidari del tabalet y donsaina; y no tenint atre aguinaldo que oferirli al music machor de la Ribera baixa pera les próximes carnistoltes, me prenc la llibertat de dedicarli este ball... de Torrent, en que tocará el pandero, en manegues de camisa nuestro comun amigo Don Fernando Ossorio.
Yo haguera volgut escriure en esta ocasió una coseta digna del selebre Sueco; pero “qui no en sap mes, en sá mare es chita,” y sobre tót 
“Ya veu, Don Chusep Bernat,
que habent un bon fi pel mich,
el mal gust del seu desich
li deu ser disimulat
a.... Enrique Perez Escrich.””
Escrich cultivó toda su vida la amistad con Bernat y Baldoví. Desde que la “musa del Chuquer” ejercía cierta protección sobre un grupo de bohemios admiradores en el Café de la Perla de Madrid. A él debemos la que quizá sea última noticia de nuestro gran poeta. Una dura y triste descripción de un enfermo Bernat y Baldoví que languidecía en un sillón poco antes de morir.



Biblioteca Darijo-Haila
La juguetona y popular musa del Júcar, el gran versificador, el poeta José, que escribió la célebre oda á la Puerta del Sol, ya no existe. Sus restos descansan en el modesto cementerio de un pueblo, bajo la fria losa de mármol que con su sencillo epitafio indica que allí se hallan las cenizas de un hombre, durmiendo el sueño sin fin de la eternidad.
¡Pobre Pepe!
Elias no te olvidará nunca; y aunque han pasado muchos años, aún se deleita en recitar tus inspirados versos y en leer tus picantes cartas.

¿Y cómo pueden olvidarte nunca aquellos jóvenes poetas, que estaban orgullosos de tu amistad y admiraban tu genio y tu inspiración? Tú eras para ellos un maestro y un padre al mismo tiempo; y á la par que los convidabas á tomar un biftek, les hacías comprender que nada hay tan bello en poesía como la sencillez del lenguaje y la “difícil facilidad” que tú tan perfectamente poseías.” El frac azul. 3ª edición.

Junto al balcón, sentado, o mejor dicho, hundido en un sillón y rodeado el cuerpo de almohadas, se hallaba el poeta José.
Tenia las manos plegadas con beatitud y la triste mirada de sus grandes ojos fija en la puerta por donde acababa de entrar Elias.
El alegre poeta de otros tiempos no era entonces otra cosa que un cadáver galvanizado, un autómata sin voluntad propia, á quien por un capricho de la naturaleza se le permitía de vez en cuando formular algunas palabras y derramar algunas lágrimas.
El frac azul. 3ª edición.

Esa Lengua Valenciana en la que ambos versificaron es la misma que Francisco Palanca y Roca usó, diez años despues de morir Bernat y Baldoví, en su “Gata Moixa”. La sencillez del lenguaje diario, la sencillez de lo que se habla... algo tan sencillo que se adquiere desde la infancia. Y que adquiere la categoría de arte en la pluma de dramaturgos, novelistas y poetas como fueron Palanca, Pérez Escrich o Chusep Bernat.

Biblioteca Darijo-Haila
En la imagen podemos ver una expresión similar a la que veíamos en la Gata Moixa de Mirallets y Piu. En ella, obra también de Francisco Palanca y Roca, leemos:

ESCRIT EN VALENSIÁ, TAL COM HUI ES PARLA

Y más abajo:

Obra premiá... pera la millor comedia qu'es presentara escrita en valensiá
El capital y el treball. Problema social. De F. Palanca y Roca. Valencia. 1885. Imp. y llibr. De Ramón Ortega. Baixá de Sen Fransés, núm.11

Aprovecho para llamar la atención a los dos pies de imprenta en catalán el primero y en Lengua Valenciana este último. Notese la forma apocopada valenciana “baixá” frente a la “cantonada” catalana.



Pérez Escrich ganó mucho dinero escribiendo lo que le permitió mantener la independencia de criterio que atesoraba desde su idealista juventud. Como independiente era Bernat y Baldoví, quien en palabras de Escrich:
no descendía nunca al terreno prosaico de los ochavos
Con esa independencia, Juan Mariana, el editor de La Gata Moixa en Lengua Valenciana, podía ser editor de la Universidad y del Ayuntamiento, algo impensable hoy en día. Y Enrique Pérez Escrich podía escribir esto sobre su, nuestra, Lengua Valenciana¨:
La Valenciana. Barcelona. 1894


Las motivaciones que mueven mi existencia no son muy diferentes de las que tenía Enrique Pérez Escrich, o de las que tendréis la mayoría de los que me estáis leyendo. Un alto sentido de la amistad, un profundo amor a mi Patria Valenciana, y la proyección de que todo lo que hago es para ejemplo de mis hijos, fruto máximo de la familia. Esos hijos que un día, si Dios quiere, heredarán la bibliotequita que cuenta todas estas historias. Me despido como lo hacía Escrich en La Valenciana.





Frank Darijo, en la Torre de Paterna, 31 de giner de 2016.

Reyne de Valencia

sábado, 11 de enero de 2020


HISTORIAS DEL IDIOMA VALENCIANO


Historias del Idioma Valenciano
 de Ricart García Moya.
 Detalle de la encuadernación, lomo y tejuelo,
 en plena piel valenciana
Si alguien desea estudiar el Idioma Valenciano en su vertiente histórica e incluso las causas y efectos del conflicto en torno a su existencia no tiene más remedio que acercarse a la obra de Ricart García Moya.

Ricart García Moya es un incansable investigador de campo, de los que van, estén donde estén, hasta los documentos. Fruto de su esfuerzo son los centenares de artículos que, desde la prensa escrita (como puedan ser los periódicos La Verdad e Información de Alicante, Las Provincias o los desaparecidos Diario de Valencia o Valencia Hui) hasta distintos portales  y sitios web, ha puesto a disposición de los interesados. Al final del artículo pondré enlaces en los que se puede acceder a alguno de estos sitios. Son varios los focos en los que ha centrado su labor. Destacan principalmente la aportación de pruebas documentales de la existencia de la propia Lengua Valenciana, la documentación de la Real Señera a lo largo de la historia, la singularidad del Idioma Valenciano respecto a cualquier otro, el clientelismo del corporativismo pancatalanista y sus prácticas anticientíficas, o, los delirios de grandeza del catalanismo y sus hondas raíces comunes con otros movimientos nacionalistas de carácter expansionista.


Además de los citados artículos es autor de diversos libros, a saber:

  • Tratado de la Real Señera. Señeras Valencianas y Pendones Catalanes. I.S.B.N. 84-88639-08-2
  •  Cuando en Orihuela hablaban valenciano. Publicado en Bubok en 2014
  •   ‘Regles d’esquivar vocables’. Nacionalismo y lexicografía I.S.B.N. 978-84-686-5924-4
  • Diccionari Historic del Idioma Valenciá Modern (DHIVAM) I.S.B.N. 84-934687-5-4
  • Apendix Diccionari Historic del Idioma Valenciá Modern (DHIVAM)  I.S.B.N. 978-84-612-7057-6
  • Diccionari Historic del Idioma Valenciá Modern. Apendix II. (DHIVAM) I.S.B.N. 978-84-615-7269-4
  • NOU DHIVAM. Diccionari valenciá pera fallers, foguerers y gayaters, en llexic, sintaxis y morfologies prohibides per els colaboracionistes del fascisme expasioniste catalá. Tomo I (A-F) I.S.B.N. 978-84-616-1582-7
  • NOU DHIVAM. Diccionari valenciá pera fallers, foguerers y gayaters, en llexic, sintaxis y morfologies prohibides per els colaboracionistes del fascisme expasioniste catalá. Tomo II (G-Z) I.S.B.N. 978-84-616-1582-
  • HISTORIAS DEL IDIOMA VALENCIANO. I.S.B.N. 84-932597-3-X

Espero poder dedicarle una entrada a cada una de estas obras pero hoy quiero centrarme en esta última.
Cubierta delantera de
 HIstorias del Idioma Valenciano, ilustrada por el autor
Historias del Idioma Valenciano se publicó en el año 2003 y pese a que soy un valencianista militante no lo compré en cuanto se editó y puedo decir que es uno de los libros que más me ha costado localizar a pesar de las muchas horas semanales que dedico a revisar catálogos del mercadeo de libro antiguo. Fue realizado en los talleres de la Imprenta Romeu, que figura como editora junto a Bernat Bernat Climent, que es precisamente quien firma el Prolec. La obra va dedicada “A la periodista María Consuelo Reyna”, quien había sido directora de Las Provincias durante 7 años, apostando claramente por la línea defensora de la identidad valenciana como había hecho también el histórico y cultísimo director José Ombuena Antiñolo. En ese año 2003, la señora Reyna dirigía el Diario de Valencia tras haber sido apartada de la dirección de Las Provincias en 1999 por el consejo de administración que inició una política editorial cada vez más colaboracionista con el pancatalanismo antivalenciano.

Historias del Idioma Valenciano es una recopilación y ampliación de algunos de esos artículos que Ricart escribió para la prensa valenciana.
Me gustaría traer aquí un par de frases de las que inician el libro, para que los que todavía no conozcan a su autor se hagan una pequeña idea de su personalidad y de las pasiones, e incluso odios que suscita, a su alrededor. Una es del Prólogo que firma Bernat Bernat:
“El llector es troba davant d’un llibre que no el defraudará.”

Cubierta trasera de
Historias del Idioma Valenciano
con una curiosa sinopsis.

 La otra es la que inicia propiamente la obra. Una “Jusificación” que con el título de “Excusatio non petita...” comienza:

“El libro que tienes delante, amigo o enemigo lector, no me convence.”


Y es esta frase, y en realidad toda la “Excusatio”, la que nos habla de la honradez investigadora de su autor y al mismo tiempo de su modestia, aspectos que le honran precisamente porque es él uno de los pocos que se ha atrevido a enfrentarse desde el intelecto y armado de pruebas documentales a los “Santones” del pancatalanismo.

Hago mías las palabras del prólogo, que traduzco del valenciano original:


 “Historias del Idioma Valenciano es un grito de denuncia ante la marginación, el expolio, el ninguneo y la negación de la identidad que viene padeciendo la lengua valenciana desde instancias politicas de poniente, del norte e incluso valencianas deslumbradas por “intelectuales” amantes de la “pela”.”


De lo estimulante que puede resultar la lectura dan cuenta los sugerentes títulos de los distintos trabajos que contiene. Unos ejemplos:

  • La  Lengua Valenciana en la Roma de los Médicis (a. 1513)
  • La Lengua Valenciana en la Cancillería Real (a.1599)
  • La valencianización idiomática de Cataluña
  • Cervantes y la “melosa” Lengua Valenciana (a. 1615)
  • La Lengua Valenciana en el Madrid de Felipe V (a. 1731)
  • Dos traducciones del catalán al valenciano (a. 1758)
  • El Idioma Valenciano en el Far West (a. 1782)
  • Dels saineters als fascistes catalaners.
Dice Ricart en la introducción que “Esto debía ser un mamotreto de más de dos mil páginas, pero la escasez de money te ha salvado, intrépido lector, de tal carga.”
Así es Ricart, un hombre que ha puesto su obra, gratis et amore a disposición de los valencianos para dotarnos de la fuerza de la argumentacón documental, liberando sus textos en internet o costeando ediciones que se vendían, como mucho, a precio para cubrir costes. Y eso, bien sabemos que siempre le cuesta dinero a quien se embarque en semejante aventura.

Detalle de la encuadernación
Historias del Idioma Valenciano,
 ejemplar de la Biblioteca Darijo-Haila
En cuanto a mi ejemplar he de decir que presenta una encuadernación que mandé hacer al taller de Alberto Cañizares. Plena piel valenciana a la Bradel (la lomera y las tapas son tres piezas separadas) en rojo rubí con base amarilla (tartracina). Las guardas están hechas con papel Geltex (apariencia textil y color beig) para no quitarle protagonismo a la piel que es badana curtida al zumaque natural. Los hierros utilizados son copias que Cañizares tiene del catálogo de Antonio Sancha. En las tapas recuadro de plumas en oro. El lomo con nervios punteados en oro y hierros en oro entre estos. El tejuelo en piel de cabra azul. Los cantos van labrados en seco así como las cejas interiores. Se cosió  a tres cordeles y se completa con unas cabezadas de algodón en rojo y amarillo y cinta de registro. Quise que los colores empleados rojo, azul amarillo fuesen un homenaje a la Real Señera que tantos esfuerzos en tiempo y dinero supusieron para Ricart en sus investigaciones. El por qué de una encuadernación así para un libro moderno es porque no pude dejar de pensar en lo que dice Pedro Salvá en el Catálogo de su Biblioteca de 1872:

“Tampoco falta quien haya censurado las espléndidas encuadernaciones de mi Biblioteca: con todo, el encuadernar lujosamente los libros raros y de mérito, no es una estravagancia caprichosa, sino una prudente precaución para preservarlos de que perezcan. ¡Cuántas veces se les habrán empleado como papel para envolver ó para encender la lumbre por verlos manchados, apolillados, mal pergeñados o rotos! Pero cuando un colector los hace recomponer, procura completarlos, los lava si lo necesitan, y les echa por fin una encuadernación de valor, hasta el más idiota los respeta; y si caen en sus manos, al momento dice: Este debe ser algún gran personaje, cuando anda tan bien vestido; y ya que no lo entienda, busca quien pague lo que juzga debe ser una joya: y he aquí salvado un libro que de otro modo habría perecido.”

Esta es, salvando las distancias, mi pretensión. Salvar al que algún día puede ser el último testimonio de una lengua que existió y que sufrió los embates de una persecución sin cuartel.

P.S.
Enlaces relacionados:
http://ricartgarciamoya.com/ (Acceso a sus últimos artículos, descarga libre del DHIVAm (actualizado) y más recursos gratuitos.

https://www.bubok.es/autores/dhivam (Compra y/o descarga gratis de algunos de sus libros.

sábado, 30 de noviembre de 2019

INTERÉS PER LA LLENGUA VALENCIANA





INTERÉS PER LA LLENGUA VALENCIANA


Interés por la Lengua Valenciana... ¿por qué? Pues porque es mi lengua y todo lo que tenga que ver con ella me interesa. Y me interesa por ser la mía y porque es una lengua perseguida. Y al ser una lengua perseguida lo son, indefectiblemente, sus hablantes, sus usuarios. Quizá, si no concurriese esa circunstancia, la de ser una lengua que quieren eliminar, mi interés por mi lengua materna sería francamente menor. Pero es el caso que los intentos de aniquilación corren en paralelo a muchas de mis vivencias. A fin de cuentas no es un tema de lingüística o filología sino un tema de LIBERTAD.
Oscar, una de las personas que han hecho de la defensa de la singularidad de la Lengua Valenciana uno de sus leit motiv, y con quien, a pesar de que no lo conozco en persona coincido bastante en las estrategias de su defensa, suele repetir por las redes sociales aquella máxima de Santa Teresa de Jesús:

“La verdad padece, pero no perece”



Y la verdad siempre es una, aunque los puntos de vista nos hagan creer lo contrario.
Hechos, intenciones...
No sé cuánta gente me leerá, quizá nadie. Si ha habido algunos incautos que han llegado aquí, la mayoría habrá pensado: “sí, sí, mucho interés pero escribe en castellano”. Y eso es algo que voy a dejar claro desde el principio. Voy a escribir en la lengua que me de la real gana. Porque este es un rinconcito LIBRE. Libre de prejuicios, libre de peajes, libre de hipocresías, libre de apriorística, libre de tantas cosas... Sólo espero que lo que se cuente aquí sea VERDAD. Como la verdad es difícil de establecer haremos hincapié en, al menos, presentar documentación, que sí, es cierto, puede ser tan altavoz de la mentira como altavoz de la verdad, pero intentaremos que la opinión tanto si está a favor de una cosa como de su contraria se apoye en documentación veraz, no manipulada. Luego, dentro de esa documentación siempre habrá que hacer el ejercicio intelectual de separar la información de la opinión, cosa realmente entretenida. “Documentación (...) no manipulada”, suena raro, suena fuerte, ¿no? Es que lo és.
Hay otros blogs, webs y grupos en diversas redes sociales que se encargan de la defensa y promoción de la Lengua Valenciana pero este es el mío. ¿Y por qué un blog a estas alturas, cuando ya parecen algo casi casi anacrónico? Pues porque yo soy así, algo anacrónico. Y lo que aquí escriba quiero que tenga el poso de la reflexión y el tamiz del estudio y así no caer en la inmediatez y la respuesta en caliente de otros rinconcitos de la red. Además, este formato me permitirá, o eso espero, recopilar mis escritos de modo que algún día pueda hacer que lleguen a mis hijos, para que, si les apetece, lean lo que fui escribiendo.
“No se puede renunciar a aquello en lo que no dejas de pensar todos los días”. No sé de quien es esta frase, ¿de Coelho? pero define muy bien lo que va a aparecer en este blog. Llevo tantos años pensando en la Lengua Valenciana... es más, llevo tantos años pensando en Lengua Valenciana.
Aquí hablaremos de textos y de pretextos, de entidad y de identidad, de autores y actores que ayudaron a enredar y desenredar la madeja que hoy es la Lengua Valenciana.También sobre su consideración histórica, social y académica.
Ah, habréis visto que escribo “Lengua Valenciana” con las iniciales en mayúscula, como si fuera un nombre propio. Ya, es un banderín de enganche, una declaración de intenciones en si misma. Los puristas del lenguaje ahorraos el rapapolvo. Desde bien niño sigo esa máxima de Juan Ramón Jiménez, “Si os dan papel pautado escribid por el otro lado”. Eso sí, agradeceré si alguien detecta faltas ortográficas (o gramaticales escandalosas) que delaten mi falta de preparación intelectual o mi laxitud y mis descuidos al escribir.
Bueno, ya me he enrollado bastante... ¡¡¡BENVINGUTS!!!